Qualcomm empezó a llamar a los procesadores de sus teléfonos inteligentes hace un par de años de una nueva manera, abandonando designaciones como Snapdragon 800 en favor de Snapdragon 8. Ahora los cambios han llegado a los procesadores para ordenadores.
Se anunció que los procesadores basados en la informática Oryon formarán parte de la línea Snapdragon X. Promete nuevos niveles de rendimiento, inteligencia artificial, conectividad y alta duración de la batería. La compañía promete grandes ganancias en velocidad y eficiencia energética. El trabajo conjunto del procesador central y la unidad de computación neuronal debería mejorar la calidad de la interacción con el dispositivo gracias a la inteligencia artificial generativa.
Esta no es la primera vez que la empresa cambia su principio de denominación. Presentó sus primeros procesadores para ordenadores en 2017, utilizando nombres como Snapdragon 835/850, al igual que en los smartphones. En 2019 aparecieron los Snapdragon 8C y 8CX.
A finales de octubre, la empresa promete proporcionar información adicional sobre la nueva línea de chips.
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